Te quiero hasta la luna, una perlita "under"

Mientras miraba esta obra, mi mente daba vueltas alrededor de este adjetivo para describirla: "Linda". "Te quiero hasta la luna" es una obra muy linda. La palabra suena un poco ingenua, como si fuese el término con el que un niño describe un espectáculo: "qué lindo!". Esta obra es ingenuamente bellísima. Pensaba de esa forma durante la puesta porque la historia que se desarrolla me llevó de viaje a mi propia infancia más de una vez.

Lo mágico de "Te quiero hasta la luna" es que toca un tema tan simple como lo es el primer amor (ese amor infantil, que no está condicionado por nada y es verdaderamente sincero), pero lo hace de una forma única. Durante la obra, todos somos niños, tanto los actores como la audiencia. La obra tiene momentos de risa, de emoción y de una ternura tan grande que no sé como describirla.

Los personajes son dos: un hombre y una mujer de 25 años. No sabemos qué relación hay entre ellos, pero nos damos cuenta de que están por emprender un viaje juntos. Durante el viaje, los personajes también se mueven en el tiempo, recordando momentos de su infancia. Francisco Ruiz Barlett y Sofía Gonzalez Gil interpretan de forma impecable la difícil tarea de hacer de niños.